lunes, 4 de marzo de 2013

Trilogía del Imperio

En "Trilogía del Imperio" Asimov nos presenta una humanidad totalmente expandido por la Vía Láctea tal y como en su momento hiciéramos en el pasado en la misma Tierra con las tierras emergidas existentes en ella.
A diferencia del anterior recopilatorio, El Robot Completo, estamos solo ante 3 historias largas: Polvo de estrellas, Las corrientes del espacio y Un guijarro en el cielo donde podemos ver el transcurso del tiempo mientras que la humanidad sigue avanzando y expandiéndose por la galaxia e incluso llegando a olvidar de donde procede.
Así podemos ver que mientras en Polvo de estrellas la Tierra es la cuna de la humanidad azotada por las tierras radiactivas productos de conflictos nucleares, se escribieron en la década de los 50 y esto confirma el miedo a una guerra nuclear que azotaba la población estadounidense, hace de nuestro bello planeta casi como un cementerio donde poca gente puede vivir con la misma tranquilidad que en otros planetas esta radiación. Pero vemos un salto cualitativo en los relatos Las corrientes del espacio y Un guijarro en el cielo donde la Tierra ya solo es conocido como un pobre planeta radiactivo, no encontramos rastro alguno de que fue la cuna de la humanidad y de donde proceden todos habiendo una corriente científica que dice que todos en todos los planetas el hombre nació de forma evolutiva hasta lo que es ahora mismo. Me recuerda este concepto a lo que muchos religiosos creen de que somos producto de un ser superior todopoderoso pues al leer esas divagaciones de los personajes y verlas totalmente extrambóticas diría que Asimov lo que intenta hacer es mostrar su escepticismo a esa teoría religiosa que perdura hoy en día aún en parte de la sociedad.

Otra cosa que veo muy curioso y actual es el tema del racismo-poder. En estas historias el racismo no tiene que ver con el color de la piel sino por el poder dentro de la galaxia  y es que si tu planeta es quién sustenta un gran poder y dominas a otros planetas el resultado es un "racismo" hacia esas personas de una forma realmente exagerada y que a uno le resulta muy familiar con lo que hoy en día podemos ver. Es curioso ver que cuando un planeta esta por encima de otro lo trate como a apestados o personas de un nivel intelectual menor al real por el simple hecho de lo que el tiempo y el pensamiento cerrado ha ido poco a poco forjando para dar como resultado una mentalidad unidireccional, algo que por desgracia ocurre en este mundo real y no solo en esta magnífica historia de Asimov.

Por último, y para concluir en forma de conclusión, nos encontramos historias de amor, guerras, misterios, argumentos que empiezan de forma simple para pasar por una fase de entramado complejo y terminar en un resolución muchas veces sorprendente e inesperada. Además hay un detalle que ha hecho que Asimov me gane aún más y es que pide perdón a los lectores porque cuando escribió las historias ciertos datos científicos eran equivocados y cambiarlos era imposibles porque entonces tendría que cambiar toda la historia. Para mi este respeto para el lector, y no solo este sino el que da hacia la inteligencia en sus historias, hace de este escritor uno de mis favoritos.