Ciencia versus Religión

Acabo de acabar de leer este libro, de igual nombre al título de la entrada, escrito por Stephen Jay Gould (1941-2002), que fue profesor de la Universidad de Harvard, paleontólogo, divulgador científico y filósofo.

Este libro no trata sobre la feroz batalla entre ambos magisterios, que uno sea mejor que el otro por X o Y causas, nada de eso, trata realmente de como ambos pueden y deben convivir en este mundo unicamente con una serie de reglas que define y explica pero que se puede resumir en que cada uno a su casa sin molestar ni meter la nariz en los asuntos del otro.

Así mismo cuenta historias muy interesante desde ambos magisterios dejando claro que esa teórica confrontación es lo más artificial que una persona se puede echar a la cara además de una estupidez mayúscula que muchas veces no benefician a ninguno de los dos, sino a extremos ideológicos fuera de toda lógica.

La parte que más me ha gustado a título personal es cuando habla sobre los "Creacionistas". Para el que no lo sepa, es una corriente estadounidense que predica, nunca mejor dicho, que lo que dice la Biblia es literal en todo, incluido el Génesis. Con lo cual el mundo tiene unos 6.000 años, mas o menos, y lo que ahora existe en temática de diversidad animal y vegetal es lo que siempre ha existido. Este movimiento ha llegado a crear leyes negando que impartieran la Teoría de la Evolución en escuelas públicas siendo esto posible al apoyarla ciertos políticos. Realmente es un movimiento muy exótico, se pasa por el forro la ciencia llegando a exponer en su museo la convivencia entre dinosaurios y Homo sapiens, tal como los Picapiedras nos revelaron. Sin lugar a dudas algo que no hace sino tener poca fe en la humanidad.

Menos mal, que la Iglesia poca cuenta les echa llegando a contar el autor una anécdota de unos estudiantes de Vaticano, sacerdotes, que formaban parte de un consejo científico de la Iglesia al encontrarse en la misma mesa que nuestro autor y contarles este que era de Estados Unidos preguntarle por exótico grupo de personas que piensan eso y quedándose pasmados los propios sacerdotes del consejo científico de la Iglesia.

En definitiva, es un libro que recomiendo por lo que cuenta y reflexiona.